La Autoridad Nacional Palestina (ANP) condenó ayer la decisión de Israel de anexionarse tierras palestinas para expandir un asentamiento judío
Trabajadores
palestinos delante de los nuevos edificios del Area 1 del asentamiento
judio de Ma'ale Adumim, al este de Jerusalén, el pasado 1 de febrero.
EFE
La Autoridad Nacional Palestina (ANP) condenó ayer la decisión de Israel de anexionarse tierras palestinas para expandir un asentamiento judío en el distrito cisjordano de Belén.
"La decisión supone un nuevo golpe al proceso de paz y a las negociaciones que no pueden prolongarse mientras continúen los asentamientos, la apropiación de terrenos y el robo de propiedades a nuestro pueblo", manifestó Nabil abú Rudaina, portavoz del presidente de la ANP, Mahmud Abás.
El funcionario palestino se refería a la noticia difundida por la prensa israelí esta semana, que revelaba que las autoridades israelíes han dado luz verde a la expansión de la colonia judía de Efrat, principal del bloque de asentamientos de Gush Etzion, en el distrito de Belén.
Para tal fin, la administración militar israelí de Cisjordania confiscó 170 hectáreas de tierras palestinas en las que se pretenden edificar 2.500 viviendas, aunque los colonos aún penden de trámites burocráticos para conseguir la aprobación final del gobierno.
"Israel dibuja hechos sobre el terreno para convertir el proceso de paz en una misión imposible, que refuerce la ocupación y dé argumentos para la continuación de violencia y el conflicto", añadió Abú Rudaina.
Y remachó que la decisión israelí "representa un reto para la comunidad internacional y la nueva Administración de EEUU".
Las palabras del portavoz palestino se producen después de que el presidente Abás manifestara ayer que "no tiene sentido" continuar la negociación de paz con Israel mientras continúe la construcción de asentamientos judíos en territorio ocupado.
El dirigente de la ANP también llamó al futuro gobierno israelí a aceptar la solución de dos Estados, uno israelí y otro palestino, y otros acuerdos internacionales sobre Oriente Medio, como medidas necesarias para reanudar el proceso de diálogo.
Israel celebró elecciones generales hace una semana, sin que de momento se sepa cuál será la composición del futuro Ejecutivo, que los analistas presumen, se inclinará más hacia la derecha y podría estar encabezado por el líder del conservador Likud, Benjamín Netanyahu.