Una mezquita en el norte de la Franja tras ser bombardeada por la fuerza aérea israelí en el séptimo día del ataque.
Musulmanes palestinos se vieron obligados ayer a realizar al aire libre las plegarias comunes del viernes, debido a los destrozos causados por los bombardeos israelíes en por lo menos 20 mezquitas de esta franja costera.
Tanto al amanecer, cuando ocurrió el primer rezo del día, como en las restantes cuatro plegarias de la jornada, decenas de miles de fieles se congregaron en las calles frente a los despojos de los recintos religiosos destruidos por la aviación y los tanques hebreos.
En otras localidades donde permanecen en pie las mezquitas, numerosas personas las colmaron en medio de cierta tensión, por primera vez desde que el gobierno judío declaró una frágil tregua unilateral, seguida un día después por el grupo islamista Hamas.
Según datos de fuentes palestinas, los ataques israelíes causaron más de mil 300 muertos, de ellos unos 410 niños y más de un centenar de mujeres, además de alrededor de cinco mil 300 heridos, casi 100 mil personas sin casa y severos daños a la infraestructura.
En ese aspecto, se estima que fueron destruidos total o parcialmente unos 25 mil edificios civiles, 16 inmuebles gubernamentales, 20 mezquitas y más de 60 escuelas, incluidas varias de las 23 que administra la ONU.
Por su lado, el portavoz de los Servicios Médicos Militares palestinos, Ahmed Kahlout, afirmó que Israel dio muerte durante la ofensiva a nueve trabajadores de esa dependencia que prestaban asistencia, incluidos tres médicos, enfermeras y personal de rescate.
Tal actuación, apuntó Kahlout, constituye una flagrante violación del derecho internacional y es considerada crimen de guerra, por lo que podría sumarse al expediente que se pretende armar para denunciar los atropellos del gobierno judío durante tres semanas de ataques.
Entretanto, dirigentes del gobierno de Hamas en la franja prometieron el pago de una ayuda de compensación y reconstrucción a los residentes, pese a las maniobras de Israel y gobiernos de la Unión Europea (UE) para debilitar su liderazgo aquí.
Taher al-Nunu, portavoz del grupo islamista, aseguró que a partir del domingo se comenzará a repartir la primera partida de entre 35 y 40 millones de dólares para resarcir daños por los bombardeos, aún cuando la UE condiciona la ayuda financiera a su salida del poder.
Israel detuvo los ataques el domingo, y como medida de presión confiscó el dinero de funcionarios y jubilados de la Autoridad Nacional Palestina en Gaza, por temor a que llegue a manos de Hamas.