Ithar Ghada Faied Admin
Cantidad de envíos : 2028 Edad : 46 Localización : Buenos Aires, Argentina Fecha de inscripción : 03/12/2008
| Tema: El musulmán correcto comprende su papel de protector y sabe que está a cargo de su hogar (Qauuâm) Miér Ene 14, 2009 7:02 pm | |
| Una de las obligaciones del marido musulmán es cumplir con su rol de qauuâm (sustentador y protector) apropiadamente. Éste es un rol que solamente puede ser cumplido por el hombre que es un líder exitoso en su hogar y familia. Dicho hombre debe tener una actitud noble y digna, ser tolerante, reconocer sus errores, ser generoso e inteligente. Debe respetar los sentimientos de su esposa, y hacerla sentir partícipe en la responsabilidad de manejar los asuntos del hogar, educar a los hijos y trabajar juntos para construir una familia musulmana íntegra y digna.
Con buenas actitudes y un trato dócil, el marido musulmán se gana el corazón de su esposa. Al musulmán se le ha otorgado la posición de Qauuâm en la familia, debido a las características masculinas y las prescripciones y obligaciones que le requiere el Islam:
{Los hombres están a cargo de las mujeres debido a la preferencia que Allah ha tenido con ellos, y deben cuidar de ellas con sus bienes...} [4:34]
El Qauuâma es una responsabilidad. Dijo el Profeta r: "Cada uno de ustedes es un pastor, y responsable por aquellos que están bajo su cuidado. El gobernante es un pastor, el hombre es pastor de su familia, y la mujer es pastora del hogar y de los hijos. Cada uno de ustedes es un pastor y responsable por aquellos que están bajo su cuidado". Transmitido por Al-Bujâri y Muslim
El papel de Qauuâm que el Islam da a los hombres no puede cumplirse correctamente a menos que el marido sea un exitoso líder de su familia. El marido musulmán no afirma su masculinidad a través de la aspereza, la crueldad, la violencia o la presión psicológica; eso es una actitud machista. La identidad masculina en el Islam es tener una personalidad fuerte y amable, y una actitud noble, tolerante, saber perdonar errores, adherirse a las leyes de Allah, contar con la determinación para aplicarlas, tener influencia positiva y liderazgo para guiar a la familia al éxito en todas las empresas, ser generoso, tener una comprensión completa de las responsabilidades en este mundo y en el otro, y una idea clara del hogar musulmán ideal conociendo y respetando la identidad y psicología de cada uno de los integrantes del hogar.
Algunas personas perciben al Islam como una religión machista que subestima a las mujeres. Se suele mencionar la situación de las mujeres en ciertos países ‘musulmanes’ para probar esa afirmación. Lamentablemente, un país ‘musulmán’ no necesariamente significa que el gobierno o los individuos de ese país sigan la legislación islámica (Shari’a). El error está en que no separan la cultura de un determinado pueblo de las enseñanzas de la religión que estas personas profesan. Existe mucha opresión e injusticia sobre las mujeres en muchas culturas del mundo. Algunas mujeres son dominadas por los hombres y se les niegan derechos humanos básicos. Esto no se aplica solo a países musulmanes, ni tampoco a todos los países musulmanes. El Islam condena este y todo tipo de opresión. Las enseñanzas del Islam prohíben la opresión a las mujeres y dejan bien claro que tanto hombres como mujeres deben ser respetados por igual.
Lamentablemente, se suele asociar erróneamente con el Islam a las prácticas de opresión contra las mujeres que existen en ciertas partes del mundo. Una de esas prácticas es la antigua costumbre pagana de mutilar los genitales femeninos (ablación), llamada a veces circuncisión femenina, que se originó y se sigue practicando en el valle del Nilo y sus zonas de aledañas. La practican una serie de grupos étnicos de diversos credos en todo el continente africano. Muchas mujeres africanas son víctimas de esta horrenda, mutiladora y barbárica costumbre.
La mutilación (ablación) de los genitales femeninos es una abominación y está absolutamente prohibida en el Islam. Es lamentable que, a pesar de que el Islam lo prohíbe, ciertos grupos étnicos hayan perpetuado esta práctica aún después de haber aceptado al Islam, logrando así que muchas personas piensen que tiene relación con la religión musulmana. En la actualidad, a medida que esas personas van adquiriendo una mejor comprensión del Islam, abandonan esa cruel costumbre. En Kenia, por ejemplo, el único grupo que no practica la mutilación de los genitales femeninos son los musulmanes.
Otra práctica abominable es la de ‘matar por honor’, que consiste en un hombre que mata a una mujer de su familia porque se siente humillado por el comportamiento de ésta. Esa conducta, si bien es muy poco frecuente, es practicada por ciertos grupos de personas en la India, Afganistán y Pakistán. En el Islam esto se considera un homicidio. No está permitido que ninguna persona mate a otra por una cuestión de ‘honor’ y es una violación tajante a la legislación islámica. El racismo, sexismo y todas las formas de discriminación están prohibidos en el Islam.
Lamentablemente, el matrimonio forzado se practica en algunas sociedades tradicionales. Es otra práctica prohibida en el Islam. Algunos padres obligaban a sus hijas a casarse en los tiempos del Profeta Muhammad r. Cuando las mujeres se quejaban de esto ante el Profeta, él anulaba esos matrimonios y les daba la opción de finalizar ese vínculo aún si ya había sido consumado, dejando un claro precedente para la ley islámica con respecto a la libertad de elección sobre el matrimonio y para terminar con esa práctica opresiva. Pero esa costumbre sigue llevándose a cabo en algunas partes del mundo actualmente, entre ellas algunas sociedades ‘islámicas’. Si bien esta práctica es ilegal en la mayoría de los países, muchas mujeres que viven en sociedades tradicionales no conocen sus derechos o tienen temor de exigirlos.
Todas estas prácticas van en contra de la ley islámica, y es responsabilidad de todos los musulmanes erradicarlas en sus sociedades. Sí, el Islam tolera la diversidad cultural y no cree en erradicar las formas de vida de los distintos pueblos, ni tampoco obliga a las personas a abandonar su identidad cultural al adoptar el Islam. No obstante, cuando las prácticas culturales de un pueblo van en contra de las leyes del Islam o privan a las personas de los derechos inalienables otorgados por Dios y de la libertad de elección, entonces es obligación religiosa abandonar esas prácticas.
Así como el Islam ha estipulado que la mujer sea tratada amablemente, también le pide a ella que cumpla su papel como compañera del hombre y educadora de la próxima generación, y le ha pedido que obedezca (1) a su marido dentro de los límites de lo permitido y de lo justo.
El Islam para ejemplificar el concepto de Qauuâm le ha prohibido a la mujer realizar ayunos voluntarios sin el consentimiento de su esposo, dijo el Profeta r: "No le es permitido a la mujer ayunar cuando su marido está presente, sin su permiso…". Transmitido por Al-Bujâri. No es así el caso con el ayuno obligatorio, como el ayuno de Ramadán, porque la musulmana debe obediencia a su Señor por encima de la obediencia a su esposo.
El Islam le dio esta responsabilidad y derecho al hombre para que oriente la vida familiar hacia la seguridad, la justicia y la dignidad.
El musulmán y la musulmana saben que su responsabilidad y compromiso esencial es con Allah por ello aclaran oportunamente que no importa cuánto se amen mutuamente, porque aman más profundamente a Allah y su Profeta, y el deseo de complacer a Allah es más fuerte que sus sentimientos, y por lo tanto no desobedecerán a su Señor para complacer a un ser humano aunque sea su cónyuge:
{Diles [¡Oh, Muhammad!]: Si vuestros padres, hijos, hermanos, esposas y familiares, los bienes que hayáis adquirido, los negocios que temáis perder y las propiedades que poseáis y os agraden son más amados para vosotros que Allah, Su Mensajero y la lucha por Su causa, pues entonces esperad que os sobrevenga el castigo de Allah; y sabed que Allah no guía a los corruptos.} [9:24]
Con esta actitud muchas de las problemáticas y caprichos que encontramos en algunos hogares musulmanes se superarían de forma adulta.
El esposo musulmán sincero con su responsabilidad debe ayudar y apoyar a la mujer a que cumpla con las obligaciones islámicas en general y especialmente el Hiyâb, que es la insignia de la mujer musulmana.
La responsabilidad del marido no se limita a la apariencia exterior, sino que también incluye el culto, la ética y la conducta. Es responsable si ella omite algún acto de adoración, o si descuida o deliberadamente ignora sus deberes hacia Allah.
El Islam considera que la mujer es un tesoro cuyo cuidado es responsabilidad del hombre. La influencia entre los cónyuges es normal, y por eso pueden beneficiarse juntos o perjudicarse mutuamente. Es por ello que Allah instó a proteger la familia del Fuego, y dio un cuadro espantoso del destino que les espera si se descuidan las responsabilidades:
{¡Oh, creyentes! Guardaos a vosotros mismos y a vuestras familias del Fuego, cuyo combustible serán los hombres y las piedras, y en el que habrá Ángeles violentos y severos que no desobedecen a Allah en lo que les ordena, sino que ejecutan cabalmente Sus órdenes.} [66:6]
En el Islam la sexualidad tiene ambos objetivos, goce y procreación. El propósito del matrimonio es el deleite con la pareja, pero también la formación de una familia. Más aún, en el Islam, el sexo dentro del marco del matrimonio es una manera de alcanzar la complacencia de Dios.
En un Hadiz narrado por Abu Dharr se menciona que el Profeta r dijo: ‘Alá ha diversificado las formas de obtener su recompensa y complacencia… en la relación conyugal hay recompensa de Alá.’ Alguien dijo: ‘¡Mensajero de Alá! ¿Acaso por satisfacer nuestros deseos sexuales vamos a recibir recompensa?’ Respondió el Profeta r: ‘¿Acaso si lo satisface ilícitamente (fuera del matrimonio) no obtendría un castigo? Así, quien lo satisface lícitamente (dentro del matrimonio) obtiene por ello recompensa y complacencia divina’.” Transmitido por Muslim
El Islam no desprecia la satisfacción del deseo sexual, y no considera en modo alguno que abstenerse de satisfacer estos deseos signifique piedad ni virtud alguna.
El Islam invita a los seres humanos a disfrutar de los placeres lícitos y de las cosas buenas de la vida, siempre que no se excedan los límites de legitimidad ni los derechos ajenos.
El Profeta r afirmó en un conocido Hadiz que cuando alguien coloca afectuosamente un bocado en la boca de su esposa, para estrechar los vínculos del amor conyugal, es recompensado por ello y obtiene la complacencia de Alá porque está tratando de alcanzar una vida en común con amor y afecto que, como dice en el Sagrado Corán, es el propósito de la vida familiar:
“Y entre Sus signos está haberos creado cónyuges para que encontréis sosiego, y os relacionéis con amor y misericordia. Por cierto que en esto hay signos para quienes reflexionan”. (Corán 30: 21)
La vida del Profeta Muhammad r documentó las enseñanzas para distintas situaciones relacionadas a la sexualidad que el musulmán y la musulmana deben estudiar e implementar en sus vidas para alcanzar la bendición de Alá y proveer un ambiente islámico a su relación. | |
|