Deseo peregrinar, pero mi Esposo me lo Prohíbe

Pregunta: Soy una mujer mayor y con recursos económicos. Comenté a mi esposo en varias ocasiones mi deseo de realizar la peregrinación, pero él siempre ha rehusado, sin haber motivo para tal postura por su parte.

Tengo un hermano mayor que tiene intención de peregrinar, ¿Podría irme con él, a pesar de la negativa de mi esposo? o ¿Dejo de cumplir la peregrinación, permaneciendo en casa, por obediencia a mi esposo?




Respuesta: La peregrinación (Hayy) es una obligación inaplazable para todo musulmán y musulmana cuando se cumplen las condiciones indispensables.

En el caso de la mujer -quien realiza la pregunta- se nota que cumple estas condiciones, por consiguiente debe emprender el viaje de peregrinación junto a su hermano, a pesar de la prohibición de su esposo. La posición del esposo es ilícita por no tener motivo razonable para oponerse.

De este modo no tiene por qué hacerle caso a su esposo, siendo las órdenes de Allah (swt) prioritarias a las del esposo, sobre todo en lo relacionado con los cinco pilares fundamentales del Islam; como la oración (Salat), el ayuno (Saúm), la contribución social (Zakát) y la peregrinación (Hayy).

De este modo el esposo no tiene ningún derecho a prohibir a su esposa que cumpla con su deber de peregrinar, sin haber un motivo que sea aceptado por los sabios.



Sheíj Ibn Yibrín